genial la terraza en la azotea para relajarse. el tráfico por la mañana puede ser molesto.

Este lugar me queda perfecto, con wifi, bar y un restaurante delicioso. Recuerdo que en mi primera estancia, el personal me indicó un lugar para cambiar dinero. Recomiendo disfrutar del brunch. ¡Vuelvo para Navidad!

Una experiencia vibrante en Lisboa

El hotel ofrece un ambiente relajado y una decoración única que nos hizo sentir muy cómodos. Disfrutamos de la comida deliciosa en el restaurante y las vistas desde la azotea son impresionantes. Un detalle especial fue el secador de pelo, ¡definitivamente uno de los mejores que he usado en un hotel!

Sin embargo, el baño era un poco incómodo, ya que no tenía puerta y el agua de la ducha siempre dejaba el suelo mojado. Además, el precio del desayuno y la cena me pareció elevado en comparación con otras opciones en la ciudad.

El hotel tiene una ubicación ideal, cerca de estaciones de metro que facilitan el acceso a las principales atracciones de la ciudad. La decoración del lugar es fantástica, creando un ambiente acogedor que nos hizo sentir como en casa. Además, el desayuno es variado y delicioso, lo que es un gran punto a favor para comenzar el día en familia.

El baño de la habitación era un poco incómodo y no tenía puerta, lo que puede resultar incómodo para algunos.

Las habitaciones son cómodas y amplias.

Me causaron un enorme problema al cargarme 1,200 euros extra en mi tarjeta sin justificación. Al intentar resolverlo, la atención fue lenta y poco efectiva. A un mes de esto, sigo sin que me devuelvan mi dinero y nadie en el hotel parece preocuparse por la situación.

Te cuento todo en pocas palabras

El hotel tiene un ambiente moderno y estiloso, pero se debe tener cuidado con el ruido del bar en la azotea y la inconsistencia en el servicio del restaurante. Las habitaciones son más pequeñas de lo esperado y carecen de algunas comodidades básicas. Aunque el brunch es delicioso, el precio es elevado en comparación con otras opciones locales.

Aprovecha la terraza de arriba para disfrutar de una bebida y las vistas de la ciudad al atardecer, te encantará la atmósfera única.

Estuvimos con amigos y nos encantó el ambiente relajado. Visitamos el Parque Eduardo VII y el Mercado da Ribeira, todo a poca distancia. La atención fue increíble y el lugar está decorado con mucho estilo. Perfecto para pasar un buen rato juntos.

Tuvimos un pequeño problema con la limpieza cuando llegamos, pero lo resolvieron rápidamente.

Este hotel podría haber sido grandioso, si no fuera por el agua que salía de la ducha dejando el suelo mojado. además, el hecho de que no haya champú ni gel me hace cuestionar la calidad de un hotel que presume ser moderno. esperé un detalle especial, pero claro, parece que eso es solo para los 'elegidos'.

La decoración es fantástica, creando un ambiente muy acogedor y relajado. La cercanía a dos estaciones de metro facilita el acceso a las atracciones. La comida es deliciosa, especialmente con verduras de temporada propuestas en el menú. sin embargo, el baño es un poco pequeño y las habitaciones son algo costosas para los servicios proporcionados. El techo del restaurante puede ser ruidoso por la noche, lo que afectó un poco la experiencia.

Decoración y ubicación increíbles!

La decoración del lugar es brutal, bien cuidada y te hace sentir super a gusto. El bar en la azotea tiene unas vistas que no te puedes perder. Pero la habitación estaba petada de equipaje, no había donde dejar las cosas y eso fue un poco molesto. Aun así, el servicio fue muy amigable.

El hotel tiene un ambiente vibrante y acogedor, con un personal amable y servicial. El desayuno es variado y delicioso, mientras que la ubicación es conveniente para explorar la ciudad. Sin embargo, la falta de atención a los detalles en la limpieza y el ruido en el bar pueden afectar la experiencia.

Habitación cómoda y decoración moderna. El restaurante y el rooftop son ideales para relajarse y disfrutar la buena comida.

El baño pequeño me hizo sentir como una sardina enlatada, ¡pero al menos descubrí que tengo habilidades frugales!

Habitación cómoda, desayuno variado. Recepción 24 horas, pero el baño es pequeño.

La terraza en la azotea es increíble, las vistas son impresionantes. Además, el diseño colorido del hotel lo hace único.

me sentí muy acogido, no me puedo quejar